Las cronicas del verano 2ª escala: “New ways of working” Késako?

07/2019 | articulo

 

Si hay una expresión que se oye en los pasillos de las sedes de las grandes empresas parisinas en este momento, es ésta… incluso parece haber sustituido al término “agilidad”, o mejor dicho, lo abarca y lo supera… ¿De qué se trata? Cuando las grandes empresas buscan adoptar “nuevas formas de trabajar”, a menudo se trata de adoptar métodos de trabajo que permitan a las empresas de nueva creación moverse más rápido que ellas, acelerar la entrega de proyectos o el lanzamiento de nuevos productos, a veces para lograr los mismos objetivos mediante la reducción del estrés y el dolor.

Esta expresión francesa se refiere generalmente a metodologías ágiles en el sentido más amplio del término: Scrum, Lean Start-up, Design thinking, Gobernanza Ágil, ,… A menudo, estos nuevos métodos de trabajo incluyen modalidades organizativas más planas y orgánicas asociadas a modos de gobernanza más colaborativos como la Holocracia, la Sociocracia, etc.

Por último, la guinda del pastel, a menudo se habla de nuevos espacios de trabajo que tienen por objetivo promover la movilidad, la flexibilidad y, en general, la inteligencia colectiva, por no hablar del teletrabajo. Las grandes empresas están invirtiendo en espacios externos de coworking, o utilizándolos como inspiración para crear conceptos similares internamente.

Si no estás familiarizado con los pequeños detalles de estos nuevos métodos, no podemos hacer nada por ti en estas Crónicas porque hemos hecho un voto de ligereza para evitar machacar todavía más vuestros cerebros derretidos por el calentamiento global… Sin embargo, podemos daros unas pistas sobre las palancas que contribuyen a activarlos y las habilidades a emplear.

 

Porque, también aquí, estamos hablando de la Organización que está emergiendo para responder a los desafíos de la bifurcación de nuestro mundo cambiante (cf. nuestra primera escala). En pocas palabras, para decirlo de forma sencilla: a medida que el mundo cambiante se acelera, a medida que es interactivo y global (tipo efecto “mariposa”), resulta imposible predecir e incluso anticiparse. El reto es adaptarse en lugar de alcanzar la excelencia para evitar quedar obsoleto o quebrar antes de llegar al santo Graal. Ese es el objetivo. ¿Cómo? Liberar “Productos o servicios mínimos viables” en cortos periodos de tiempo, compartirlos con clientes/usuarios locales (internos o externos), tener en cuenta sus comentarios…. y empezar de nuevo… iterar, aprender, experimentar, incrementar, experimentar, aprender… aparentemente simple sobre el papel en una tarde de verano, pero tan exigente en la realidad…..

 

Porque detrás de estos bucles se esconden muchas habilidades que no hemos desarrollado o poco en nuestra escolaridad (¡y tampoco en la universidad!) : mostrar lo imperfecto, cometer errores, aprender de estas imperfecciones, captar cada feedback negativo como si fuera una pepita e incluso cuestionarla para generarla… partiendo del postulado de que no sabemos. Poner nuestro ego en el bolsillo, sincronizarnos con un colectivo, asumir nuestras responsabilidades hacia otros roles, olvidarnos de nuestros “territorios”, de los juegos políticos, de las ambiciones puramente individuales para servir juntos al mismo propósito….

Bueno, eso puede ser mucho menos deseable…. o por el contrario generar entusiasmo! Cualquiera que sea la emoción, estas nuevas formas de trabajar son en la era de la revolución digital, lo que el taylorismo fue en la revolución industrial: ¡una palanca esencial! Así que aprovechemos esta oportunidad para desarrollar nuevas habilidades, enriquecernos con nuevos talentos, transformar nuestros hábitos….

Para meditar en la playa o en una caminata….